jueves, 13 de octubre de 2011

EL ESPEJO


Aqui tenemos la segunda técnica que nuestra profesora nos ha enseñado: "EL ESPEJO".
En este ejercicio, nos distribuimos en perejas (a mi me toco con Cristian), y en primer lugar, lo que teniamos que hacer era imitar al que teníamos enfrente, tan sólo mediante el lenguaje no verbal, nada de palabras. El empezó ha hacer gestos, y yo seguidamente le imitaba; al principio era un poco raro, por que Cristian no sabía que hacer, pero al final, acabámos haciendo tonterías, y nos lo pasamos genial.
Después me toco a mi ser el "conductor" de mi compañero, es decir, yo hacia el primer gesto y él me imitaba, y yo como no sabía que hacer, le relaté mi día, desde que me levanté hasta que fuí a clase (acciones como levantarme, lavarme los dientes, enchufar el portátil,etc.), y claro un cachondeo, porque creo que nos entendimos muy bien, y yo lo veía a él más cómodo en la postura de imitante.
A continuación, los dos teniamos que hacer gestos e imitar a la vez, era un ejercicio de compenetración en  pareja; de como teníamos que cambiar de "espejo" a "conductor" en poco tiempo, e intentar que si el otro se quedaba bloquedado, tomar uno mismo la iniciativa para que el otro pasase de conductor a imitador.
Me gustaría destacar la compenetración entre mi compañero y yo, ya que él se sentía más cómodo imitándome y yo más agusto guiándole, ya que con Cristian tengo una relación de amistad; seguramente, si hubiera sido con alguien menos cercano a mí, habría sentido una sensación de vergüenza interior.
De esta actividad me gustaría hacer un hincapié: todo la actividad ha sido muy divertida, habiéndose conseguido sacar una sonrisa a todos los que la estábamos haciéndola, además de ser  un ejercicio de iniciativa que podemos encontrarnos cualquier día en el hospital, si un compañero se bloquea, saber reaccionar a tiempo, es decir, ser el conductor de la situación y poder desarrollar la actividad sin percances.
Mostrar actitudes como la de iniciativa; mostrarse dispuesto a hacer "imitar", es decir, dejar que actúe el otro, porque a lo mejor tiene más claras las ideas, son los puntos a tener en cuenta; saber cuando tomar la postura de líder o de seguidor; saber compenetrarse con tu compañero y actuar los dos de manera competente, puede facilitar en gran medida el trabajo que vamos a desempeñar en nuestro futuro.

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